Despedidas

Bernardo siempre pensó que las despedidas deberían ser como esos tristes pañuelos agitados en estaciones de tren, al ritmo acelerado de una locomotora de vapor que chirría para arrastrar vagones y pasajeros, mientras estos últimos miran pesarosos con los brazos apoyados en las ventanillas a las personas que dejan atrás. Leer más…