Esteban

Escribir para Esteban era cómo hablar al oído de una estatua, cómo garabatear versos en la arena de la playa, fugaz, inútil, estéril. Para él, narrar era cómo esperar al eco mudo de la llanura, al brillo escaso de la luz de enero en las tímidas flores de los almendros, Leer más…

La cometa

Me preguntó qué quería de regalo y yo le contesté:—Una cometa, me gustaría que me regalaras una cometa.Y, entonces, me miró, con esa mirada curiosa impregnada con la media sonrisa que enmarcaba su incredulidad a mi respuesta, esa duda que me consultaba sin hablar, pensando que era una broma. Pero Leer más…